En el momento de la práctica la manta es ideal como accesorio soporte para adaptar las posturas dando confort a hombros, caderas y piernas, permite también doblarse, enrollarse y ser usada como cojín, como así también para abrigar en el momento de la relajación para revertir el descenso de la temperatura corporal.
Manta de polar suave al tacto y abrigada, ideal para los días de baja temperatura. Es lavable con agua fría en lavarropas.
Tamaño: 2 mts de largo x 1,50 mts de ancho